Este es el primero de una serie de artículos en los que exploraremos en profundidad el método de Milton H. Erickson, presentado como una contribución invaluable de Coaching Evolution USA a los estudiantes de Programación Neurolingüística.
“La mente no es un vaso para llenar sino una lámpara para encender.”
– Plutarco.
¿Pero cuántas veces nos encontramos sin un fósforo a mano?
El Dr. Milton H. Erickson, un eminente psiquiatra y psicoterapeuta estadounidense, conocido por su pionero trabajo en hipnosis y psicoterapia, nos ha entregado la caja de fósforos que necesitamos. Erickson desafió los métodos convencionales de su tiempo, creando un enfoque distintivo a la terapia que destaca por su uso de lenguaje indirecto y técnicas ingeniosas para explorar las profundidades de la mente.
- Metáforas: Erickson a menudo utilizaba metáforas en su trabajo. Estas podrían ser historias o anécdotas que aparentemente no tenían relación con el problema del paciente, pero que indirectamente abordaban y ofrecían soluciones a sus problemas. Las metáforas permitían que la mente inconsciente del paciente interpretara la historia y encontrara su propio camino hacia la solución.
- Reencuadre: Erickson era conocido por su habilidad para “reencuadrar” o cambiar la percepción de un paciente sobre una experiencia o problema. Podía ayudar a los pacientes a ver sus problemas desde una nueva perspectiva, permitiéndoles reconocer y aprovechar recursos que no sabían que tenían.
- Sugerencias poshipnóticas: Erickson utilizaba sugerencias poshipnóticas para implantar ideas o comportamientos que se activarían después de la sesión de terapia. Por ejemplo, podría sugerir que cada vez que un paciente se tocara la oreja, se sentiría relajado y calmado. Esta técnica se utiliza para ayudar a los pacientes a llevar los beneficios de la terapia al mundo real.
- Anclaje: Erickson usaba a menudo la técnica de anclaje, que implica asociar una respuesta emocional o física con un estímulo particular. Por ejemplo, podría hacer que un paciente recordara un momento en que se sintiera extremadamente tranquilo y luego asociara ese recuerdo con un gesto particular, como apretar el puño. Posteriormente, el paciente podría usar ese gesto para evocar esa sensación de calma cuando fuera necesario.
- Doble Vínculo: Erickson a veces empleaba lo que se conoce como un “doble vínculo”. Esencialmente, presentaba dos opciones a su cliente, pero ambas conducían al resultado deseado. Esto puede ser especialmente útil cuando se trata con resistencias.
- Reframing en contexto: A veces, Erickson cambiaría el contexto de un problema o comportamiento para darle un nuevo significado. Al hacerlo, podría ayudar a los pacientes a ver cómo un comportamiento que era problemático en un contexto podría ser útil en otro.
- Utilización: Erickson creía en la utilización de todo lo que está disponible en el contexto terapéutico, incluyendo la resistencia del paciente. En lugar de luchar contra la resistencia, la incorporaba en su enfoque y la utilizaba como una herramienta para el cambio.
- Confusión: Erickson a veces utilizaba técnicas de confusión para ayudar a superar las resistencias conscientes. Esto implicaba presentar información de una manera que era difícil de seguir conscientemente, obligando a la mente a cambiar a un modo de pensamiento más inconsciente.
- Distorsión del tiempo: Erickson a veces alteraba la percepción del tiempo de un paciente durante la hipnosis. Podría hacer que un período corto de tiempo se sintiera más largo o viceversa. Esto puede ser útil para ayudar a los pacientes a superar traumas o para trabajar en el cambio de comportamiento a largo
En los próximos artículos, desentrañaremos las diversas técnicas y principios que conforman el enfoque de Erickson, desde la utilidad de la ambigüedad y las preguntas con etiqueta, hasta el arte de usar oxímoron y el “más, el más”. Este será un viaje por el laberinto del inconsciente, una aventura para descubrir cómo, a través del uso innovador del lenguaje y la comunicación, Erickson logró encender la lámpara de nuestra mente, iluminando las vías para un cambio duradero y profundo.
Así que, ya sea que seas un estudiante de la Programación Neurolingüística, un coach profesional o simplemente un entusiasta del poder de la mente, te invitamos a unirte a nosotros en esta exploración. Al final, todos somos exploradores en el vasto ecosistema de nuestra mente, buscando la luz que nos guíe en nuestro camino hacia un mayor entendimiento y bienestar. Y gracias a Erickson, tenemos a nuestra disposición una poderosa caja de herramientas para iluminar nuestro camino. Acompáñanos en este viaje, y descubre cómo encender la lámpara de tu propia mente.
La Belleza en la Ambigüedad
Nuestra conversación con el inconsciente comienza con un aspecto crucial del método de Erickson: la ambigüedad. Palabras que fluyen como ríos con múltiples corrientes, como ‘abajo’, ‘izquierda’, ‘pato’, ‘mano’, ‘espalda’, se convierten en guías cruciales en el viaje hacia las profundidades de la mente. Al enfrentarse a la ambigüedad, nuestra mente se vuelve un hervidero de actividad, procesando todas las posibilidades y, en este proceso, la mente inconsciente se despierta, emergiendo desde las profundidades de la oscuridad hacia la luz de la conciencia.
La Suavidad de las Preguntas con Etiqueta
Las preguntas con etiqueta, esas sutiles sugerencias disfrazadas de consultas, juegan un papel crucial en la terapia Ericksoniana. “Esto es interesante, ¿no es así?” Con esta simple estructura, Erickson lograba disipar resistencias y establecer un terreno de entendimiento mutuo. Un terreno en el que las ideas pueden florecer y los cambios pueden comenzar a tomar forma.
El Ritmo del Más, el Más
Una vez establecida la sintonía entre terapeuta y cliente, Erickson desplegaba la técnica del “más, el más”. “Cuanto más intentas resistirte a entrar en trance, más encuentras que tus ojos quieren cerrarse por sí solos”. Aquí, el inconsciente es invitado a danzar, a seguir el ritmo y finalmente a tomar la iniciativa en la danza del cambio.
El Intrigante Juego de los Oxímorones
Erickson también era un maestro en el uso de los oxímorones, combinaciones de palabras que parecen contradecirse pero que, al unirse, crean un impacto poderoso en la mente inconsciente. ¿Cómo puede existir un “silencio ensordecedor” o una “dulce agonía”? Este juego de palabras obliga a la mente a salir de su zona de confort, a explorar nuevas posibilidades y, en este proceso, a abrirse al cambio.
Erickson nos mostró que no necesitamos recurrir a la fuerza o a la imposición para conectar con nuestro inconsciente. En lugar de eso, podemos usar el lenguaje y la comunicación de manera sutil y respetuosa para invitar al cambio y al crecimiento. Al final del día, todos somos exploradores en este vasto ecosistema de la mente. Y gracias a las contribuciones de Erickson, tenemos una brújula para guiarnos en nuestro viaje. En los próximos artículos, continuaremos explorando el fascinante mundo de la hipnosis y la psicoterapia de Erickson. Así que, manténganse en sintonía y prepárense para sumergirse aún más profundamente en la maravilla del inconsciente.
Por supuesto, lo que hemos presentado en este primer artículo apenas roza la superficie del método de Erickson y sus contribuciones al campo de la psicoterapia y la hipnosis. En los siguientes artículos de esta serie, nos sumergiremos más profundamente en cada uno de estos temas. Desentrañaremos el misterio de la ambigüedad, exploraremos el arte de las preguntas con etiqueta, profundizaremos en la técnica del “más, el más” y nos deleitaremos con el juego de los oxímorones.
Cada uno de estos artículos será un viaje en sí mismo, una invitación a explorar las vastas profundidades de nuestra mente inconsciente y a descubrir el poder transformador de la comunicación efectiva. Y en cada paso del camino, tendremos como guía a Milton H. Erickson, un verdadero maestro en el arte de la psicoterapia y la hipnosis.
Así que, estén atentos y prepárense para este emocionante viaje. Nos esperan descubrimientos asombrosos y oportunidades para el crecimiento y el cambio personal. Al final, todos somos exploradores en este vasto ecosistema de la mente. Y gracias a las contribuciones de Erickson, tenemos una brújula para guiarnos en nuestro viaje.
Así que, únete a nosotros en este viaje de descubrimiento y crecimiento. Estén atentos al próximo artículo de esta serie, donde comenzaremos a explorar en detalle la belleza y el poder de la ambigüedad en la terapia. ¡Hasta pronto!