El verdadero arte del coaching no está en dar respuestas, sino en hacer las preguntas que guíen al individuo hacia su propia verdad.

Recientemente tuve el privilegio de llevar a cabo una sesión de coaching con una persona que, por razones de confidencialidad, llamaremos “María”. Durante nuestra conversación, utilicé dos estrategias de cuestionamiento particularmente efectivas que me gustaría compartir con ustedes: indagar en el “Observador” y hacer preguntas al “Quién” del coachee.

Indagar en el Observador

Le pregunté a María: “¿Cómo sería María, la que sí tuviera esa confianza?”. Esta pregunta tenía como objetivo permitirle a María visualizar una versión de sí misma donde ya posee la cualidad deseada, en este caso, la confianza. Al imaginar y describir esta versión de sí misma, María fue capaz de ver un objetivo claro y tangible que podía alcanzar.

Preguntas al ‘Quién’ del Coachee

Más adelante en la sesión, cambié el enfoque hacia el ‘quién’ de María, preguntándole: “¿Quién eres cuando estás en tu mejor momento?”. Este tipo de pregunta va más allá de las habilidades y comportamientos para centrarse en las cualidades intrínsecas y los valores de la persona. María pudo entonces reflexionar sobre su esencia, sus valores y sus fortalezas, lo que contribuyó a una mayor autoconciencia y consistencia interior.

Estas dos estrategias de cuestionamiento pueden ser poderosas herramientas en el proceso de coaching. No solo ofrecen al coachee una visión más clara de sus metas y deseos, sino que también les proporcionan una mejor comprensión de quiénes son en su núcleo. A través de este enfoque, María se sintió empoderada para tomar medidas hacia la transformación personal, y es un enfoque que recomendaría a cualquier coach que busque desbloquear el potencial de sus clientes.

Acompañar en lugar de Interpretar

La conversación con María revela un elemento crucial en el enfoque del coaching: el arte de acompañar en lugar de interpretar. Mientras María exploraba sus cualidades y sus ambiciones, mi rol como coach no fue el de diagnosticar o etiquetar sus respuestas, sino más bien acompañarla en su propio descubrimiento personal.

Acompañamiento y Descubrimiento Personal

María identificó una serie de cualidades—creatividad, perfeccionismo, dedicación al trabajo—que son esenciales para ella. Esta identificación no surgió de mis interpretaciones, sino del espacio seguro que se creó para que María pudiera explorar sobre sí misma. Este enfoque de acompañamiento permite que el coachee, en este caso María, se abra a diversas posibilidades: ¿Quién es ella realmente? ¿Qué desea alcanzar? ¿Qué le motiva?

Elementos Emergentes en la Sesión

La sesión de coaching no sólo se centra en la identificación de fortalezas y debilidades, sino también en la exploración de elementos emergentes como limitaciones, retos, acciones y compromiso en el cambio y la mejora. La clave aquí es no forzar resultados inmediatos, sino permitir que estos elementos salgan a la luz de manera natural.

La Importancia de la Presencia

Como coach, es fundamental estar plenamente presente durante la sesión. Este enfoque de “estar presentes” permite que el coachee se sienta seguro y apoyado, lo que facilita un espacio para la reflexión profunda y el descubrimiento personal.

La técnica de acompañar en lugar de interpretar en coaching permite que el coachee explore su identidad, deseos y motivaciones de una manera más abierta y significativa. Este proceso ayuda no sólo a trazar un camino hacia las metas, sino también a comprometerse de manera más efectiva con los cambios necesarios para alcanzarlas.

Invito a todos los lectores a compartir sus experiencias y pensamientos en los comentarios abajo. Su participación es invaluable para esta comunidad de aprendices y expertos en el camino del autodescubrimiento y el desarrollo personal.

Profundizar en lo que Limita: Desentrañando las Barreras Psicológicas

Profundizar en las Limitaciones

El siguiente paso crucial en nuestra conversación fue cuando comencé a indagar más profundamente en lo que limita a María. “¿Para qué ese miedo?”, pregunté, permitiendo que María explorara las raíces de su hesitación. Este tipo de pregunta es fundamental en el proceso de coaching porque ayuda al coachee a tomar consciencia de lo que realmente le está frenando.

Buscando las Raíces del Miedo

María, al principio incierta, comenzó a reflexionar sobre la posible influencia de su entorno familiar en su comportamiento actual. “Mi núcleo familiar ha sido cauteloso, son más bien conformistas”, compartió María. Aquí, empezamos a tocar una capa más profunda de su psique, vinculando sus limitaciones actuales con las experiencias y los condicionamientos de su pasado.

El Poder del Entorno Familiar

La influencia del entorno familiar en nuestras decisiones y comportamientos es a menudo subestimada. María reconoció que su familia, aunque estable y amorosa, tal vez no haya fomentado un espíritu de toma de riesgos o ambición más allá de la comodidad del status quo. Esta revelación le permitió a María ver cómo ciertas creencias y actitudes podrían haberse “heredado” y estar influyendo en sus decisiones actuales.

La Importancia del Autoconocimiento

Profundizar en estas limitaciones y entender sus raíces no es solo un ejercicio académico. Es una oportunidad para que María tome consciencia de las barreras autoimpuestas y, con ese conocimiento, pueda empezar a desmantelarlas. No se trata de encontrar una solución inmediata, sino de comprender a fondo para poder actuar de manera más informada y auténtica.

Conclusión

Este tipo de indagación profunda es una herramienta poderosa en el proceso de coaching. Permite al coachee, en este caso María, descubrir y enfrentar lo que le limita, y abre el camino para posibles soluciones y cambios significativos en su vida.

Una vez más, les invito a compartir sus experiencias y reflexiones en la sección de comentarios. Su aporte enriquecerá esta discusión sobre cómo superar nuestras limitaciones y vivir una vida más plena y auténtica.